El presunto violador de Villa Urquiza complicado por una prueba

Hubo una coincidencia al cotejar las fichas dactilares del psicólogo Marcelo González Calderón, de 54 años, con las huellas levantadas por los peritos en un local donde el violador atacó a una de sus víctimas. El hombre había sido detenido el domingo metros de un boliche, luego de que una de las víctimas lo reconociera como quien había abusado de ella el pasado 22 de agosto en Villa Urquiza.

La Policía Científica de la Policía Federal informó a los investigadores del caso que hubo una coincidencia al cotejar las fichas dactilares del psicólogo Marcelo González Calderón, de 54 años, con las huellas levantadas por los peritos en un local de la avenida Triunvirato al 3900, de Villa Urquiza, donde el violador atacó el 28 de agosto.

Voceros policiales explicaron que los peritos en rastros de la Unidad Criminalística de la Policía Federal que trabajaron en el local habían levantado varias huellas en distintos sitios del local comercial donde la víctima estuvo con el abusador, como un depósito y un baño.

«Se levantaron decenas de huellas y cuando se cargaron en el AFIS (la base de datos de huellas de personas con antecedentes), no había coincidencias con ningún delincuente», explicó uno de los investigadores judiciales.

La misma fuente contó que cuando se detuvo al psicólogo González Calderón, «se le tomaron las huellas de sus diez dedos y al compararlas con las improntas levantadas en el lugar de la violación, hubo una coincidencia».

Con esta prueba de rastros, la situación del psicólogo que trabajaba como empleado en una dependencia del Estado quedó más comprometida en la causa.

Es que la fiscalía del distrito de Saavedra-Núñez, a cargo de José María Campagnoli, y el Juzgado de Instrucción Nº 13, subrogado por el juez Ricardo Farías, ya cuentan con el reconocimiento que hizo la víctima en la calle, la huella y algunos elementos secuestrados ayer en su departamento que coinciden con los robados a algunas de las víctimas.

La situación del imputado podría agravarse, ya que al menos en este caso de la mujer violada en el local de avenida Triunvirato, el abusador dejó rastros de semen que ahora serán cotejados con el patrón genético del psicólogo sospechoso mediante estudios de ADN.