Disturbios y balazos en el Hospital Evita de Lanús

El hecho ocurrió esta mañana luego de que un presunto ladrón que se encontraba internado falleciera. Sus familiares provocaron destrozos y la policía logró controlar la situación. La madre del joven muerto explicó las razones de los incidentes.

Familiares de un supuesto ladrón que murió mientras estaba internado, provocaron disturbios y destrozos dentro del Hospital Evita de Lanús.

El fallecido se encontraba internado por una herida de bala, como consecuencia de presunto un robo ocurrido el domingo pasado luego de cual recibió un balazo por parte de un policía.

Al conocer su muerte, sus familiares comenzaron a provocar disturbios y a destrozar las instalaciones del hospital.

El jefe departamental de Lanús, comisario mayor Carlos Perillo, explicó que todo se inició «por la muerte de un delincuente que estaba internado en grave estado y entubado, luego de ser baleado el domingo pasado en Villa Diamante por un teniente de la policía bonaerense al que quiso robarle el auto».

Perillo confirmó que el joven fallecido «se encontraba detenido y con consigna policial por orden de una fiscalía».

«Los familiares de esta persona comenzaron a cuestionar e increpar a los médicos y provocaron destrozos», añadió el jefe policial.

Sobre la agresión registrada dentro del centro asistencial, el director provincial de Hospitales del Ministerio de Salud bonaerense, Claudio Ortiz, confirmó a la prensa que «ante el fallecimiento en la madrugada de este paciente y avisada la familia, se produce un primer hecho de violencia contra el equipo de salud».

El funcionario informó que «por suerte ninguno de los miembros del equipo sufrió ningún daño» y que la agresión consistió en que dentro del hospital arrojaron «sillas y cestos de basura».

En tanto, fuentes policiales informaron  que uno de los efectivos policías habría recibido una herida cortante, aunque no revistiendo gravedad.

Por su parte, la madre del joven que murió negó ante la prensa que su hijo fallecido sea un delincuente, denunció que la policía le habían armado la causa por la que estaba detenido y justificó por eso la ira de la familia en el hospital.

«La comisaría quinta (de Lanús) lo culpó de un delito que no cometió. De ahí que surgió este disturbio por parte de los familiares y hermanos. A él me lo mataron acá cuando yo me retiré. ¡Quiero al fiscal!», gritó la mujer en la puerta del hospital.

«Le quieren hacer pagar algo que no hizo. Todos son una manga de corruptos y mis otros cuatro hijos ahora están todos detenidos en la comisaría primera de Lanús. Los demás son amigos y vecinos», dijo en referencia a los 13 detenidos por los disturbios.

«¿Tienen que romper el hospital? Sí, pónganse en el lugar de uno! ¡Se va a hacer Justicia! ¡El fiscal lo mandó a matar para que no hable, porque él era inocente! ¡Quiero la autopsia! ¡¿Dónde está la ley?!», exclamó la mujer entre lágrimas.

El Hospital Evita quedó custodiado por 50 efectivos de infantería para prevenir nuevos incidentes, mientras los médicos y empleados se quejaban de la falta de seguridad en el lugar.