Necochea: reclamarán por la demora en la reparación del Puente Colgante

El próximo martes habrá una protesta de comerciantes y vecinos, quienes manifestarán su disconformidad por la pronunciada demora en la ejecución de las tareas de reparación y remodelación. Temen que la obra no esté concluida para la temporada.

La protesta se realizará a las 10 en el Puente Dardo Rocha, siendo probable que se interrumpa el tránsito en este estratégico paso que une Necochea con Quequén, y que es utilizado por centenares de automovilistas en forma diaria.

“Estamos afectados de un lado y de otro, porque todos hemos perdido mucho dinero y esperemos que no nos sorprenda una nueva temporada de verano con el puente cerrado”, expresó Ariel Backlo, quien posee un lubricentro en Quequén, a escasos metros del Colgante.

El viernes por la mañana, en coincidencia con la visita a Necochea del vicegobernador Gabriel Mariotto, se pudo apreciar que alrededor de una decena de operarios estuvo trabajando en la construcción de los cordones de hormigón. Los enormes chapones que se hallaban en los accesos fueron retirados, para luego ser vueltos a colocar.

Los comerciantes vienen insistiendo en que “todos los días hay tres trabajadores que hacen tareas menores”, al tiempo que no existen miras de profundizar las acciones tendientes a completar la colocación del tablero de hormigón para, finalmente, depositar la capa de rodamiento asfáltico de seis centímetros de espesor.

El puente fue cerrado el 27 de junio de 2010 y el plazo de finalización de obra se fijó a fines del corriente mes, aunque se concedería una prórroga por “las demoras por cuestiones climáticas”.

“Es una pena que esto no se termine cuando falta tan poco”, expresó Bracklo, recordando que meses atrás firmó un petitorio junto a otros comerciantes, para que la Municipalidad gestione ante la Provincia de Buenos Aires por la falta de pago a la empresa adjudicataria Cahem S.A.

Advirtió que “si seguimos de esta manera quedaremos como los comercios que estaban en cercanías del puente Ezcurra, que se cayó con las inundaciones del ´80 y que nunca más fue construido, permaneciendo muerto todo ese sector, tanto del lado de Necochea como de Quequén”.

El titular del lubricentro se preguntó “¿quién me devuelve la plata que he perdido en todo este tiempo?” y lamentó que se produzcan situaciones como la que le tocó atravesar semanas atrás, cuando desde el municipio se lo intimó a él y a otros comerciantes, por una demora en el pago de la tasa de seguridad e higiene.

Al margen de la carpeta asfáltica que resta ejecutar, quedan obras complementarias como la iluminación, la parquización de los accesos y la colocación de una red para combatir la formación de nidos de palomas debajo de la estructura.