«No queremos venganza, queremos justicia»

Miles de personas se acercaron al anfiteatro de la ciudad de Dolores para acompañar a los padres del joven asesinado a golpes bajo la insignia «justicia es perpetua».

Los 18 de enero serán siempre difíciles de atravesar para Silvino Báez y Graciela Sosa, los padres de Fernando Báez Sosa, asesinado a golpes hace exactamente tres años en la puerta del boliche Le Brique, de Villa Gesell.

Hoy, en un nuevo aniversario del crimen que paralizó al país, más de 2.500 personas se acercaron al centro de la ciudad de Dolores para expresar apoyo a los padres del joven estudiante de abogacía y pedir que la ley sea aplicada bajo el lema «justicia es perpetua»

En la ciudad donde los rugbiers oriundos de Zárate están siendo acusados de homicidio agravado, los padres de Fernando encabezaron el acto que, en forma de ceremonia intrarreligiosa, se llevó a cabo desde las 19.30 con epicentro en el anfiteatro Libres del Sur, donde Silvino y Graciela fueron recibidos con aplausos y al grito de «¡Justicia!».

«Estoy de pie por Fernando», expresó Graciela Sosa entre el llanto y el dolor por la ausencia física de su hijo, al mismo tiempo que aseguró que esta lucha también es «por todas esas madres que también perdieron a sus hijos y no tuvieron justicia».

«Preparamos la valija en busca de Justicia, no queremos venganza, solo que paguen lo que le hicieron a mi hijo», dijo con la voz entrecortada, recordando el día que viajaron para asistir al juicio que enfrentan los ocho jóvenes de Zárate en el Tribunal Oral en lo Criminal Nº1 de Dolores.